lunes, 12 de diciembre de 2011

Tras la careta...

Hace unos días recibí un correo electrónico de un desconocido pidiéndome permiso para publicar en la Web Pueblos de España unos comentarios que hace tiempo hice sobre el pueblo de mi familia Asturiana. "Turón". Al parecer había entrado en mi blog y le había gustado lo que en su día publiqué y que hoy veo reflejado fielmente en la mencionada Web,gracias a este amable lector.
Uno no sabe nunca quien puede estar leyendo todo lo que colgamos en Internet, a veces, hay sorpresas en los comentarios que se hacen en nuestros blog y otras nos encontramos con gente a la que hacia mucho tiempo habíamos perdido la pista y vuelven a nuestra vida por mor de la autopista de la información en la que casi nada se oculta, pues es fácil conocer la procedencia de todo comentario a través de IP desde la que se hizo.
Me sorprendió en su día un comentario en un post sobre mi padre y la firma del mismo, era un compañero jubilado de mi progenitor que vertía loas a su trabajo y su manera de ver la vida. Me sorprendió un comentario de un desconocido en otro post, dándome casi por muerto ya que hablaba en pretérito y haciendo elogios sobre mi persona (Mi padre decía: "Dios nos libre de la época de las alabanzas", refiriéndose a que toda alabanza se hace en los funerales sobre el finado) y me sorprende cada día la cantidad de comentarios que se añaden al blog y a los blogs de amigos, la gran mayoría bajo seudónimos, alias, motes y sobrenombres que tratan de ocultar al posible interlocutor (es muy difícil mantener una conversación con alguien anónimo), cuando hablamos con alguien, sabemos cuales son sus gustos y preferencias, sus puntos débiles (aquellos que nunca hay que mencionar) y sus aficiones, ver en sus ojos la reacción a nuestras palabras y poder modificar a tiempo una frase o corregir una opinión para no herir a nadie,pero hablar con un desconocido siempre supone que hay que hacerlo de algo tan neutro como la meteorologia... (igual que en un ascensor, donde la conversación mas socorrida es el frío o el calor del día). Muchas veces el comentario, necesitaría de precisiones y una conversación posterior que no podemos mantener públicamente y menos aún con un desconocido oculto tras el antifaz informático, por eso muchas veces me quedo con el comentario y no hago puntualizaciones al mismo salvo que el antifaz, este ocultando a un amigo y conocido.
Lo entiendo... aunque me sorprenda...se que no es fácil hacer comentarios públicos jugándote quizá el puesto, el prestigio o una reprimenda de algún aludido. No es fácil expresar a las claras un sentimiento común, quizá sobre una persona o una entidad, pero que a la hora de la verdad nadie se atreve a manifestar públicamente. No es fácil... ¡no!... afear conductas en publico cuando cara a cara tampoco se hace, por eso entiendo el seudónimo, la careta, el antifaz, para manifestar aquello que en el fondo nos gustaría poder manifestar sin tapujos y es que somos así...nuestros miedos, nuestras limitaciones, nuestros temores nos obligan a escudarnos en disfraces que a veces son innecesarios, somos así y la vida es un carnaval donde todo se oculta tras la careta.