jueves, 29 de diciembre de 2011

Inocente...

Hoy debe de ser mi día…
¡Que inocente soy!...
Aún creo en la amistad
Aún creo en que a pesar de todo..todo puede ir mejor
Aún creo que la gente es sincera
Aún creo en que la libertad existe
Aún creo en la Solidaridad
Aún creo en la mano tendida
Aún creo en que con esfuerzo todo se consigue
Aún creo en el compañerismo
Aún creo que no hay mala fe
Aún creo en el perdón y en ser perdonado
Aún creo en que el tiempo todo lo cura
Aún creo en el futuro
Aún creo que el pasado no fue mejor
Aún creo en que la enfermedad es curable
Aún creo en la suerte
Aún creo en la sapiencia de mis maestros
Aún creo que creer es bueno…
Y creyendo me he sentido INOCENTE por creer en tantas cosas
HOY DEBE SER MI DIA….

(Tan inocente, que esto lo escribí ayer y lo pubico un dia despues...¡No tengo perdón!)

miércoles, 28 de diciembre de 2011

El final de otro año mas...


El año está terminando y como suele ser costumbre en estos casos, hago repaso de lo que han deparado los doce meses anteriores…luces y sombras (mas luces que sombras) ,en todos los aspectos de mi existencia se mezclan dando una visión casi “otoñal” de lo que ha sido el transcurrir de los días, problemas laborales y familiares se unen a éxitos en ambos casos creando una mar de dudas en el análisis posterior que hacemos de cada situación...¿lo podría haber hecho mejor?, en que me equivoqué y por que me falló aquella persona…todo a “toro pasado” resulta casi entupido de analizar ya que nada puede volverse atrás y lo hecho o dejado de hacer ya no se puede modificar.

Un año más…nuevas experiencias que añadir a bagaje de la vida y lecciones aprendidas a veces no sin encontronazos o con decepción de personas con las que compartes muchas horas y satisfacciones al haber logrado una sintonía con otras que ha llevado a la consecución de objetivos y un buen ambiente durante las largas horas de trabajo.

¡Que rápido me están pasando los últimos años!, tomo como referencia el fallecimiento de mi madre… ¡Ocho han pasado ya!...y uno se pregunta ¿por que cada año el tiempo parece correr mas y más?, cada año que pasa, los hijos se hacen mayores, los mayores ancianos y entre unos y otros, está uno que carece de la juventud y energía de los primeros y ya ve achaques, falta de fuerzas y lapsus de los segundos, sin estar encuadrado aún entre ellos.

Días buenos y días malos, alegrías y tristezas, éxitos y fracasos nos dicen a diario que estamos vivos y sentimos, que no hay nada irremediable (salvo cuando te mandan al huerto del cura en caja de pino a criar malvas).

Cada año tiene su historia y esta suele dar nombre al año ( como ya comenté en alguna ocasión ) y así sustituyo los dígitos por: el año de Paris, el año de Bruselas, el año de la fusión, el año de mi primera (y única) baja por enfermedad o el año en que mi hija comenzó a volar sola o Fernando estudió en Oviedo..
Este año lo denominaré como el año "puerta de entrada a los 60" ya que el día 11 de febrero cumpliré esa edad.

Ver como el tiempo pasa y a veces mas deprisa de lo que uno quisiera, produce un vértigo preocupante, todo parece que ocurrió ayer y el futuro se viene encima con tal velocidad que no da casi tiempo a asimilar una situación cuando otra nueva se está produciendo y una tercera se esta fraguando. Aquella lentitud en pasar el tiempo que sentíamos cuando éramos mas jóvenes (la impaciencia hacia largo el tiempo) ya despareció y uno comienza a preocuparse por lo que realmente importa, la salud, la familia y disfrutar de los momentos buenos de esta vida, (que son tres días y ya han pasado dos).
Seguiré volcando en este blog retazos de mi vida, situaciones divertidas e historias del pasado.

Las ilusiones de la juventud, con ella se fueron (eran eso…ilusiones), ahora uno vive el día a día tratando de sacarle el máximo partido a cada hora, cada minuto, cada segundo que escapan de nuestra manos, tratando de compartirlos con los seres queridos, con MI FAMILIA… así con mayúsculas, pues es algo que uno ha creado, cuidado, mantenido y mimado ya que es el germen de mi inmortalidad. Ellos recogerán el testigo y continuaran el camino, como hice yo de mis padres y ellos de mis abuelos, espero que piensen que no lo hice mal del todo…traté con mi ejemplo de enseñarles el camino que siempre creí correcto, como hicieron mis padres conmigo y espero hagan ellos con sus hijos, el tiempo sigue y aún podré seguir abriendo camino a los que vienen detrás, cometiendo errores de los que aprender y enseñar que no se deben cometer, aciertos que marcar, para que otros sigan el camino y cada año…volver la vista atrás para… “ver la senda que no volverás a pisar”…”caminante no hay camino…se hace camino al andar”… , para todos FELIZ 2012

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Con mis mejores deseos...


Asomado desde mi ventana miraba el brillar de las estrellas en un cielo iluminado por la blanca luna, su brillo hacia presagiar una noche de hielo en la que al amanecer aparecerían escarchados árboles y tejados. Abajo, en la calle, las guirnaldas colgadas de balcón a balcón iluminaban con sus lamparillas la ilusión de las gentes en las fechas navideñas, que enfebrecidas recorrían los escaparates buscando regalos con los que obsequiar a sus seres mas queridos.
Volví a alzar la vista hacia la luz de luna, a soñar con tiempos pasados en los que la ilusión de mis pequeños en estas fiestas me hacia decorar la casa con figuras del Belén y árboles de navidad, a construir con un tambor de detergente una figura de una Papa Noel de blanca barba hecha con algodón y traje rojo confeccionado con cartulinas. Este año he vuelto a sentir aquella ilusión, las figuras del Belén vuelven a decorar la casa junto con tres Papa Noel, para seguir una tradición y ya hago planes sobre posibles regalos con los que llenar de alegría a mis hijos y a mi mujer.
Una sombra pasó ante la luz de la luna, por un momento, aquella nube perdida me hizo imaginar un carro tirado por renos en el que un orondo personaje de jovial sonrisa, traía felicidad a las gentes de paz, esa misma felicidad que yo hoy deseo a todos cuantos seguís este modesto blog. FELICES FIESTAS a todos.

martes, 20 de diciembre de 2011

Y pude seguir mi camino...

Aprendí a vivir sin mirar mas allá de mi horizonte, nadie mejor que yo sabia donde estaban mis limites y hasta donde podía llegar, pero me equivoqué, mi camino fue mas largo de lo esperado y pronosticado, ante mi propia sorpresa pude hacerlo paso a paso, sin prisas pero sin pausa he recorrido la andadura de una vida en la que no me he podido quejar de casi nada. Sabía que jugaba en desventaja, que mis fuerzas mermadas desde el principio por una enfermedad, irían perdiéndose con los años augurándome una triste existencia que por el momento no ha llegado a producirse y espero nunca llegue ese día.
Si los demás corrían, yo seguía mi camino, paso a paso, apuré en ocasiones mis fuerzas y oculté mis dolores, siempre me dio rabia que alguien pudiera pensar que no iba a ser capaz, cuando de mi nacían unas ganas enormes de seguir adelante, de no decaer nunca. Tomé a broma lo que para mi era natural pues nunca fui igual que los demás, me reí de las dificultades y riéndome de ellas las he superado hasta el presente en el que mis fuerzas fallan más de lo habitual y a las que pongo una sonrisa pensando...”al menos hasta aquí llegué” y aún puedo seguir mi senda. Hace ya cuatro años, alguien intentó apartarme del camino. ¡Que poco me conocía! Tuve que volver a demostrarme a mi mismo, que no tenían razón, pues por un momento me hicieron dudar,( quizá la única vez que alguien lo consiguió) no tenia que demostrar nada a nadie, solo a mi mismo que no había perdido la carrera. Hoy sigo con ilusión mi viaje en esta vida pidiendo que las fuerzas no me fallen, mientras, aparto los dolores de mi camino poniendo buena cara al mal tiempo y bromeo con cada tropezón, con cada caída, con cada esfuerzo al subir escaleras terminado el día dando gracias por haber podido vivirlo sin haber sido una carga para nadie.

sábado, 17 de diciembre de 2011

MADRE...


Cuantas horas en la cabecera de mi cama, velando mis sueños, expectante de cualquier dolor que pudiera surgir, preocupada por la evolución de mis operaciones. Horas que traté de compensar en aquellos tres meses, en los turnándonos los cuatro hermanos llenábamos aquellas horas de angustia en el viejo hospital de la Santísima Trinidad... ¡Cuantas horas echa usted al cabo del día!... Me dijo una enfermera, no respondí, solo pensé, se lo debo, muchas mas estuvo a mi lado y otras tantas que hubiera sido necesario lo habría estado. Mi pena, nunca confesada, es que el día que falleció yo estaba de viaje, muy lejos de esta fría Salamanca donde al llegar cada 17 de Diciembre el recuerdo de aquellas horas me encoge el alma. Ya hace 8 años y ¡parece que fue ayer!, 8 años en los que enmudecieron sus pinceles y sus cuadros quedaron huérfanos, mudos, colgados en la fría pared como testimonio de su paso por esta vida.

Dicen que nadie muere mientas alguien le recuerde. Aún quedan, cuatro hijos, nueras, yernos, siete nietos que aún la mantendrán viva en su memoria. Hoy el recuerdo se ha vuelto escrito, tratando de perpetuar esa memoria, hoy escribir cada letra me ha costado mas que nunca, Madre...mas que nunca...

lunes, 12 de diciembre de 2011

Tras la careta...

Hace unos días recibí un correo electrónico de un desconocido pidiéndome permiso para publicar en la Web Pueblos de España unos comentarios que hace tiempo hice sobre el pueblo de mi familia Asturiana. "Turón". Al parecer había entrado en mi blog y le había gustado lo que en su día publiqué y que hoy veo reflejado fielmente en la mencionada Web,gracias a este amable lector.
Uno no sabe nunca quien puede estar leyendo todo lo que colgamos en Internet, a veces, hay sorpresas en los comentarios que se hacen en nuestros blog y otras nos encontramos con gente a la que hacia mucho tiempo habíamos perdido la pista y vuelven a nuestra vida por mor de la autopista de la información en la que casi nada se oculta, pues es fácil conocer la procedencia de todo comentario a través de IP desde la que se hizo.
Me sorprendió en su día un comentario en un post sobre mi padre y la firma del mismo, era un compañero jubilado de mi progenitor que vertía loas a su trabajo y su manera de ver la vida. Me sorprendió un comentario de un desconocido en otro post, dándome casi por muerto ya que hablaba en pretérito y haciendo elogios sobre mi persona (Mi padre decía: "Dios nos libre de la época de las alabanzas", refiriéndose a que toda alabanza se hace en los funerales sobre el finado) y me sorprende cada día la cantidad de comentarios que se añaden al blog y a los blogs de amigos, la gran mayoría bajo seudónimos, alias, motes y sobrenombres que tratan de ocultar al posible interlocutor (es muy difícil mantener una conversación con alguien anónimo), cuando hablamos con alguien, sabemos cuales son sus gustos y preferencias, sus puntos débiles (aquellos que nunca hay que mencionar) y sus aficiones, ver en sus ojos la reacción a nuestras palabras y poder modificar a tiempo una frase o corregir una opinión para no herir a nadie,pero hablar con un desconocido siempre supone que hay que hacerlo de algo tan neutro como la meteorologia... (igual que en un ascensor, donde la conversación mas socorrida es el frío o el calor del día). Muchas veces el comentario, necesitaría de precisiones y una conversación posterior que no podemos mantener públicamente y menos aún con un desconocido oculto tras el antifaz informático, por eso muchas veces me quedo con el comentario y no hago puntualizaciones al mismo salvo que el antifaz, este ocultando a un amigo y conocido.
Lo entiendo... aunque me sorprenda...se que no es fácil hacer comentarios públicos jugándote quizá el puesto, el prestigio o una reprimenda de algún aludido. No es fácil expresar a las claras un sentimiento común, quizá sobre una persona o una entidad, pero que a la hora de la verdad nadie se atreve a manifestar públicamente. No es fácil... ¡no!... afear conductas en publico cuando cara a cara tampoco se hace, por eso entiendo el seudónimo, la careta, el antifaz, para manifestar aquello que en el fondo nos gustaría poder manifestar sin tapujos y es que somos así...nuestros miedos, nuestras limitaciones, nuestros temores nos obligan a escudarnos en disfraces que a veces son innecesarios, somos así y la vida es un carnaval donde todo se oculta tras la careta.

lunes, 5 de diciembre de 2011

En verdad deberia ser una obligación...

La primera obligación del ser humado, es SER FELIZ, la segunda HACER FELICES A LOS QUE LE RODEAN, y en este empeño uno trata de dar lo mejor de si mismo, a veces olvidando que uno no puede conseguir todo lo que desea, para si mismo y para los demás, no obstante en este empeño se consigue hacer una vida mas llevadera, dejando de lado preocupaciones incertidumbres, decepciones y en ocasiones malos humores provocados por esos mismos que te rodean, en el trabajo, en la calle, en el supermercado o incluso en la sala de espera de una consulta.
Hoy se observa un cabreo permanente en la gente que te rodea, es difícil ver una sonrisa, un gesto amable, un trato cordial en personas con las que compartes a veces horas de oficina o simplemente unos minutos de ascensor y es que los tiempos tampoco acompañan, una crisis negada por tiempo, necesidades básicas que ponen en peligro necesidades lúdicas, relajantes del espíritu laborioso y que solían unir a las personas en momentos divertidos, están dejando paso a ceños fruncidos por la preocupación y los agobios de final de mes. Ser feliz en esta situación resulta muy complicado, sobretodo cuando ves que el sueldo que te ingresan a primeros de mes se reduce inmediatamente como por arte de magia (magia negra) a las pocas horas y por culpa del dinero de plástico al que has dado uso el mes anterior.
La alegría de las navidades que otros años se plasmaba en un bullicio callejero entrando y saliendo de las tiendas, cargados de paquetes, este año parece haberse reducido, por el contrario unos grandes carteles invitan a entrar ofreciendo descuentos nunca vistos de 40 y del 50 por ciento y es que este año hacer felices a los demás con un regalo sorpresa, va a estar crudo.
No hay ninguna duda que el dinero no hace la felicidad, pero también es verdad que la ayuda mucho, (muchísimo en algunas ocasiones), por eso, este año, aquello de FELIZ NAVIDAD, va a resultar complicado para algunos.
Hasta las luces festivas parecen haber perdido su brillo, ¡hay que ahorrar! Y todos nos echamos en manos de la lotería, esa lotería que nunca toca pero que dicen lo hace cuando y donde mas se necesita, allá donde la desgracia se cebó durante al año, donde las catástrofes se produjeron o donde el tiempo estropeo cosechas y fabricas, existe la creencia popular de que la lotería caerá con certeza. Pues este año, debería caernos a todos, la crisis, la hipoteca, el crédito personal nos están estropeando la felicidad y son una gran desgracia que debería arreglarse con la lotería de Navidad. No me han pagado los de las Apuestas Mutuas del Estado, ni esto es el nuevo anuncio de la Lotería de este año, no seáis suspicaces, pero algo hay en lo que creer para levantar el animo y recuperar todos la felicidad perdida

domingo, 4 de diciembre de 2011

A un poeta salmantino...


Saltar, correr, bailar, patinar, verbos que nunca pude ejercitar
Reír, cantar, soñar, amar, verbos que ocupan mi existencia
Y solo extrayendo de ellos su esencia
Puedo decir que allí se halla el altar
Donde siento toda la presencia
De mi torpe caminar…
Como poeta soy todo un desastre, juro que no volveré a intentarlo, prefiero la fluidez de la prosa que el verso, la inmediatez de la palabra que se encadena al tecleo del ordenador y que fluye con facilidad en mi mente, contar las cosas como son, sin rebuscar con artificios del leguaje la expresión directa, llana y simple de lo que el corazón dicta y la cabeza interpreta, nunca fui bueno en el arte de verso y siempre me pareció difícil y rebuscado, pero bello y profundo cuando un maestro lo ejercitaba…A mi lado estuvo y compartí con él grandes ratos, el poeta salmantino JOSE LEDESMA CRIADO, de fácil verso, que ensalzaba las bondades de nuestra tierra, llegando incluso a utilizarlo en los juzgados en mas de una ocasión, mientras ejercía lo que el llamaba su hobby, frente a la poesía, su profesión. Aún guardo dedicados varios de sus libros que de vez en cuando repaso, hallando perlas nuevas del lenguaje.
Donde dije Saltar, correr, bailar… intenté expresar con este verso todo aquello que eché alguna vez en falta, creando una imagen de lo que realmente no puedo hacer por mi condición física…ves…así es mas fácil de expresar.
Reír, cantar, soñar, amar…sí son cosas que puedo hacer y en las que uno pone todo su afán, sin el artificio del verso, expreso mejor el sentimiento y sin embargo, reconozco con envidia lo hermoso que puede llegar a ser el encadenado de versos dibujando un sentimiento
Nunca seré poeta, amigo PEPE, solo notario en prosa de momentos de mi existencia, para quien quiera compartirlos conmigo, envidiando tu facilidad de verbo y tu corazón de salmantino enamorado de su tierra.

jueves, 1 de diciembre de 2011

¿Vida virtual?...¡No gracias!...


Nacieron con un móvil en una mano y un ratón de ordenador en la otra, juegan sin levantarse de la silla ni salir a la calle, no saben lo que es hacer caminos de tierra para jugar a las carreras de chapas ni usan un clavo para jugar, ni construyen un patín con rodamientos y tablas, no saltan a la comba ni juegan al escondite francés, pero son capaces de tener el mundo en sus manos, comunicados con mas de 20 millones de usuarios, compartiendo fotos, música y su vida a través de una pantalla, ocultando sus verdaderos sentimientos y creando avatares de su propia existencia, imágenes ficticias de una existencia ideal que ellos mismos crean en sustitución de su vida cotidiana y real. Se enamoran de ídolos de barro (quizá como nosotros) y han perdido los ideales de lucha y protesta que tuvimos en los años 60, ya no se manifiestan en las facultades no hacen huelgas por la libertad, la igualdad, ni piden amnistías. Les preocupa la ecología por que en su mundo los mensajes catastróficos sobre el futuro de nuestro planeta son el pan nuestro de cada día, viven mundos asolados por guerras nucleares y catástrofes apocalípticas, luchando con seres imaginarios y se ríen de nuestras pistolas de juguete, de nuestros indios y vaqueros, de nuestros ladrones y policías, se relacionan a través de Twenti,Facebook, de Hotmail Gamail o Senond live y sus alegrías y desgracias parecen ser tan virtuales como su vida ficticia creada por sus deseos y no por una vida real, y yo me pregunto ¿Son felices así?,¿Qué futuro les espera cuando choquen con la dura realidad de la que huyen?, cuando tengan que enfrentarse de verdad al egoísta, al trepa, al impresentable de turno, a la contrariedad del día a día, a que otros te manejen y cambien tu vida o tus esquemas preconcebidos, cuando tengan que resolver su subsistencia diaria y encarar un problema que no puedan solucionar pidiendo puntos al administrador del programa o ganarlos con una acción heroica ante un monstruo alienígena.
A mi también me hubiera gustado diseñar mi vida virtualmente, poco habría cambiado de la misma, quizá nada, pues no aspiro a imposibles y trato de ser lo mas realista en un mundo virtualizado, idealizado, manejado y programando por la publicidad machacona de televisión y prensa en la que continuamente se nos presentan modelos ideales difíciles de alcanzar. En fin una segunda vida paralela a la real, (en un mundo virtual) no me llama la atención, prefiero sentir el dolor y saber que vivo, la contrariedad y saber que vivo, la desilusión y saber que vivo, el cariño de la familia y saber que vivo, la ironía del destino y saber que sigo vivo

martes, 29 de noviembre de 2011

Todo un camino recorrido


Ha pasado el tiempo, ese devenir que tantas veces menciono en mis escritos, no se si por que cada día siento con mayor recelo el paso de los días que uno tras otro van cayendo inexorables. Los recuerdos del pasado se hacen cada vez mas fuertes trayendo a mi memoria tiempos en los que a pesar de mis dificultades físicas, mantenía un ritmo de vida mas activo en el que el caminar no era doloroso y me sentía capaz de todo. He recorrido media España conociendo tierras y gentes, trabajado y disfrutado a lado de gallegos, catalanes, Castellanos, Levantinos, Andaluces, Asturianos y Vascos de los que guardo mil recuerdos en un álbum que se ha ido llenado con horas de trabajo y viajes innumerables.
De vez en cuando abro sus paginas y hojeo las fotos, leo los folletos recogidos en el camino, los menús guardados con esmero y las notas que en su día fui dejando escritas sobre aquella reunión, aquella convención o aquel viaje. Siento nostalgia de lugares y compañeros de camino y a la vez la satisfacción de haber podido recorrer aquellos lugares y compartir momentos con ellos. ¡Pude! y no sin esfuerzo, pero menor que el que necesitaría ahora que los años me han llenado de unos dolores que entonces no existían y las fuerzas han ido dejando paso a una permanente lucha por mantener el ritmo diario, que aún puedo superar, que aún puedo aguantar y mantendré pese a todo mientras las ganas de vivir, con los míos y por los míos me sigan acompañando.
Me sorprenden caminatas y viajes al recordarlos, el subir y bajar de autocares sin apenas esfuerzo, mantener como mantuve el ritmo de caminar de quienes me acompañaban y las muchas horas en solitario al volante de mi coche viajando de un lado para otro, sin sentir el cansancio. ¡Fue posible!, lo hice sin sentirme condicionado, superando cada momento y circunstancia y he vivido sin saber que llegaría un momento en el que todo cambiaria. Los años no me han perdonado, ni aquellos esfuerzos que hice sin saberlo. Quizá hoy este pagando un peaje de una vida en la que nunca me sentí limitado y en la que sigo pensando que aún me queda mucho por recorrer.

lunes, 28 de noviembre de 2011

El valor de cada dia...


Será que me hago mayor... será que la vida cambia las personas y las cosas... será que voy aprendiendo con los años... será...será... pero últimamente me observo y observo mis reacciones ante determinadas cosas de la vida y estas no se parecen en nada a las que hubiera tenido años atrás.

Suelo encontrar el lado positivo, relativizo las cosas y pienso que podría haber sido peor si la cosa es mala, o que no hay bien que por mal no venga si la cosa es buena. No doy importancia a lo que no la tiene y valoro los pequeños detalles que antes me pasaban desapercibidos, ahora los cazo al vuelo, quizá con la ansiedad de que se produzcan. Muchos de mis temores e incertidumbres sobre la salud, quedan minimizados ante el paso del tiempo sin que la cosa empeore, como se me había pronosticado y asumo que todo ello debe durar lo que el tiempo quiera y las circunstancias me dejen.

Si esto es hacerse mayor, bienvenido sea, pero me temo que no es cuestión de edad, pues cada día veo que los mayores también han perdido la paciencia, que no valoran las cosas pequeñas, por pequeñas que son, que hasta incluso pierden la educación que luego exigen a los jóvenes y que ven el vaso medio vació cuando aún queda mucho por apurar en el mismo.

¿Qué es entonces lo que me ha ocurrido a mí? Mi impaciencia ya crónica para hacer las cosas, a veces atropelladamente, deprisa y corriendo sin pararme a pensar mucho, se ha tornado pausada, acompasada, flemática. Doy importancia a lo que la tiene y de paso me evito berrinches innecesarios y meteduras de pata, que antes eran frecuentes. Analizo y pongo en tela de juicio toda información que me llega y al final de todo ello acabo disfrutando de una tranquilidad que antes no tenia.

Dejé de lado el protocolo (ya apenas uso corbata), el móvil y horas fuera de horario pendiente de cuestiones laborales, pero me siento mas eficiente, resolutivo y satisfecho con mi labor, de lo que nunca antes me había sentido, mi memoria, se ha recuperado una vez liberada de no se que presión y ahora si recuerdo nombres y datos que antes se me quedaban en el tintero si no los anotaba.

Me he olvidado, de la etiqueta, que bajo mi nombre aparecía en las tarjetas de visita y ahora solo soy yo, mi nombre, mi propia existencia y la de aquellos que me rodean y lo merecen.

Quien crea que se trató de hacerme daño, puede que esté en lo cierto, pero no lo consiguieron, quien crea que se trató de ofenderme, puede que esté en lo cierto, pero no lo lograron.

No es la edad, no son los años, es que la vida me ha enseñado muchas cosas en muy poco tiempo

viernes, 25 de noviembre de 2011

Ese Otoño inexorable de la vida...

Hay ocasiones, temporadas mas bien, en las que los cambios de tiempo me influyen no solo físicamente, si no, también mentalmente (Perogrullo habló...) a todos nos afecta el Otoño, el frió del invierno y el sol de la primavera, pero no se... quizá por que los años van haciendole a uno mas sensible a estos cambios, los voy notando con mayor crudeza.(Hoy ha sido uno de esos dias en los que el dolor no me ha abandonado durante toda la jornada)
Tras un espléndido verano lleno de sol y aire libre, este Otoño me sume en ciertas tristezas que trato de alejar y dolores que pretendo paliar, sin llegar a conseguirlo del todo.
Quizá por eso, me he sentido perezoso para ponerme a escribir y cuando lo he hecho, he borrado todo lo escrito pues no me reconocía en mis opiniones, ni las frases escritas reflejaban el verdadero sentimiento del momento.
Borre un pequeño articulo sobre los "cafres" que inundan nuestras ciudades las noches de botellón, borré párrafos dedicados a la desilusión y desconfianza sobre nuestros dirigentes, empeñados en demostrar que quien entra en política es con la intención de llenar sus bolsillos y no de servir a la colectividad. Borré un alegato sobre la justicia, esa misma que ahora parece tomar rumbos de modernidad dejando libres asesinos y violadores confesos, maltratadores y terroristas que por fallos en tramitaciones burocráticas quedan libres para seguir campando a sus anchas. Borré mil lamentos sobre un río Tormes sucio y abandonado, dejado de la mano de Dios por una disputa entre Junta y Diputación, entre Ayuntamiento y que se yo quien, sobre la competencia o no del que debería cuidar un entorno donde se crió Lázaro de Tormes y donde poetas y pensadores encontraron inspiración que hoy no tendrían.
Borré, quizá lo que no debería haber borrado y ahora me serviría para componer un cuadro de mi estado anímico en estos momentos. Me gustaría borrar esa tristeza y melancolía con que el otoño nos regala todos los años y recuperar esa vitalidad del verano. Pero el tiempo, sigue inexorable hacia el invierno, solo la costumbre, la practica, el empeño en seguir haciendo las cosas, me mantiene en pie aunque haya ocasiones en las que sienta unas ganas enormes de mandar todo a paseo.(Es influencia del Otoño y algun dolor que no cesa ni con los medicamentos, solamente eso...), seguiré soportando las madrugadas que cada vez van siendo mas oscuras, los atardeceres que tampoco tienen luz y soñaré con el sol de la primavera y las calidas aguas del verano, soñaré y mientras sueño la vida siguirá a mi alrededor fluyendo como un rio, el rio del otoño de mi vida.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

¿Por que la justicia se tapa los ojos?...

La primera noticia llegó  a media mañana a través de una conversación intrascendente con un colaborador de Zamora, en la sucursal de la localidad estaban sufriendo un atraco, según las primeras noticias la calle se hallaba acordonada por la policía y cinco rehenes en el interior.
Sentí la inquietud por el estado de mis compañeros ante una situación que a medida que nos llegaban las noticias, era mas grave que un simple atraco, un demente, pirado había retenido a punta de pistola a mis compañeros y sus exigencias eran incongruentes cada momento que pasaba, luego, la noticia que todos estaban bien y habían sido liberados por la policía.
Inmediatamente acudí a Internet, ya había algo publicado en algún diario digital, que describía en palabras de algún compañero lo ocurrido. Tome el teléfono y llame a mi buen amigo Juan Carlos, solo me contesto estoy bien pero luego hablamos, estoy con la policía.
A mi llegada a casa vi. Las imágenes en la TV y de nuevo me sentí preocupado más que por lo ocurrido, por lo que pudo ocurrir. La inseguridad que día a día crece ante la negación constante de los Delegados del Gobierno, es patente cada día en las noticias. Si hace unos días vi, acordonada mi propia vivienda por la policía y bajar detenidos a dos inquilinos de una de las viviendas de mi edificio que habían amenazado con dos cuchillos jamoneros a la propia autoridad tras montar un escándalo, hoy siento de nuevo esa inseguridad y la indignación cuando luego se publica que todos ellos tienen un historial amplio de antecedentes y siguen campando a sus anchas por las calles. (Mis vecinos han vuelto a las andadas). Puedo entender que haya que guardar una cierta seguridad jurídica con las detenciones y los detenidos, que se tenga que cumplir la legislación procesal y penal para evitar abusos de autoridad o que se inculpe a inocentes, pero siento que esa misma legislación nos deja al resto en una precariedad de seguridad en nuestros bienes y en nuestra integridad física frente al delincuente o el loco, que siento están mas protegidos que el resto de los ciudadanos. Sirva como ejemplo, lo largos que se hacen los procedimientos judiciales y lo cortas que son las detenciones de estos maleantes que a las pocas horas ya están en la calle campando a sus anchas.
En fin, tendrá que ser así, (no seré yo quien pida o añore la ley de Linch dejando la justicia en manos del pueblo alterado, ni la vuelta de la ley del talión) incluso alguien puede llegar a pensar que todo el razonamiento anterior es pura demagogia. Posiblemente quien así opine es que nunca ha llegado a encontrarse en una situación complicada y ojalá nunca tenga que enfrentarse a ninguna. Cuando estudiaba  derecho, siempre hubo una cosa que me preocupó e inquietó: ¿Por que a la justicia se la representa con los ojos tapados?, ¿que es lo que no quiere ver?, o peor, ¿Quien le ha impedido la visión y con que intención?.

martes, 22 de noviembre de 2011

Los gritos del silencio...


A veces, el silencio puede ser un grito desgarrado, sin sonidos, sin estridencias, un silencio absoluto puede ser más expresivo que el mayor de los alaridos.
Silenciar no es olvidar, perdonar, dejar pasar, no sentir, dar por terminado algo. Es simplemente otra de las maneras de expresarse aunque no se haga de forma convencional y se pueda entender de mil maneras, posiblemente ninguna de ellas acertada.
Hay quien dijo que somos dueños de lo que callamos y esclavos de lo que decimos, quizá el silencio sea otra manera de esclavitud auto impuesta, junto con la manera de seguir siendo dueños de nuestros pensamientos, nuestros sentimientos y nuestras penas o simplemente respetuosos con los demás, no expresando en voz alta lo que uno rumia en su interior y que expresado pudiera ofender.
El silencio no es hipocresía, ni es cobardía como alguno pudiera pensar, quien así lo hace es por que él mismo aplica el silencio por esos mismo motivos, el silencio suele ser dolor no compartido, dolor que se oculta para que los demás no sufran contigo, y sin embargo, en el silencio, ese silencio absoluto auto censurando la libre expresión, puede que estemos pidiendo (con gritos de silencio) que alguien nos preste un poco de atención.
Todos hemos pasado momentos de silencio, quizá algún día, quizá en algún momento salgan a la luz como un volcán en erupción los sentimientos contenidos o quizá sigan guardados por pudor, pero el silencio sigue siendo un grito sin sonido, una llamada de atención sin señales, que solo se oye por quien está atento y sabe interpretar este silencio.

jueves, 17 de noviembre de 2011

¡Ahí os dejo una idea peregina!..¿O, nó tanto?

Colocar a las personas de edad en las cárceles y los delincuentes en las residencias de ancianos.

· De esta manera, nuestros ancianos tendrían acceso a una ducha todos los días, al ocio, paseos, medicamentos, exámenes dentales y médicos regulares.

· Recibirían sillas de ruedas etc.

· Recibirían el dinero en vez de pagar por su alojamiento.

· Tendrían derecho a la vigilancia continua por vídeo, por lo que de inmediato recibirían la asistencia después de una caída u otra emergencia.

· Sus camas se lavarían dos veces a la semana, lavada y planchada la ropa con regularidad.

· Un guardia vendría cada 20 minutos y les llevaría sus comidas y sus bocadillos directamente a su habitación.

· Tendrían un lugar especial para recibir a su familia.

· Tendrían acceso a una biblioteca, sala de ejercicios, terapia física y espiritual, así como la piscina e incluso la enseñanza gratuita.

· Pijamas, zapatos, zapatillas y asistencia jurídica gratuita bajo petición.

· Habitación, privada y segura para todos, con un patio de ejercicios, rodeado por un hermoso jardín.

· Cada hombre de edad tendría derecho a un ordenador, televisión, radio y llamadas ilimitadas.

· Tendrían una "junta directiva" para escuchar las quejas y los guardias tienen un código de conducta que debe respetarse!

· Los delincuentes tendrían platos fríos, se quedarían solos y sin vigilancia.

· Las luces se apagarían a las 20: 00 horas.

· Tendrían derecho a un baño a la semana, vivirían en una pequeña habitación y por la que tendrían que pagar al menos 1.500 euros por mes, sin esperanza de salir con vida!

De esta forma ¡habría justicia para todos!

miércoles, 16 de noviembre de 2011

La maquina de la verdad...

Nunca digas nunca jamás, rezaba el titulo de aquella novela de James Bond, nunca niegues aquello que un día será demostrado como verdadero, o lo que en saber popular “nunca digas este cura no es mi padre” o “de este agua no he de beber”. Pues bien, estamos de campaña electoral, día a dia se nos ametralla con mítines, alocuciones, grandes discursos, en los que uno descubre siempre que o se tiene muy mala memoria por los políticos o mienten todos como bellacos. Aún no he escuchado a uno que no haya mentido en algo, que oculte lo que anteriormente dijo, o se desdiga de lo que en otro tiempo pregonó como verdad absoluta. Todo ello me produce un desasosiego y un desanimo que me hace plantearme una abstención que por inútil e irresponsable no voy a consumar, pero que me hace entender en parte, a todo aquel que se abstenga de acudir a las urnas en dejación de un derecho y un deber que todos debemos cumplir.
Los telediarios, se han convertido para mi en una nueva diversión, encontrar en cada uno de los oradores políticos, sean del partido y color que sean, sus incongruencias, mentiras y olvidos. El juego es tan simple que siempre acierto a la primera y termino por coger el periodico que tengo a mano y terminar el autodefinido o encontrar los siete errores, que tienen más dificultad que lo anterior.
En fin, habrá que ir a votar, lo que aún no tengo claro, es a quien ni si merecerá la pena, pero el deber es el deber y para eso estamos en una democracia por la que se luchó durante años y muy pocos pueden disfrutar (o padecer ¡no se bien!), mientras seguiré usando los telediarios haciendo de detector de mentiras, o de “maquina de la verdad” que tan usada es en otros programas de televisión y produce la misma hilaridad que esta.

martes, 15 de noviembre de 2011

La moda verde...Una lección de ecologia...

Hoy me ha llegado un curioso y divertido correo que me hablaba de la ecologia, el reciclaje y como estos terminos han sido aprovechados por las grandes superficies para hacer su agosto vendiendo bolsas que antes regalaban, esto da pie el siguiente relato:

En la fila del supermercado, el cajero le dice a una señora mayor que debería traer su propia bolsa, ya que las bolsas de plástico no son buenas para el medio ambiente.
La señora pide disculpas y explica: "Es que no había esta moda verde en mis tiempos."
 El empleado le contestó: "Ese es ahora nuestro problema . Su generación no puso suficiente cuidado en conservar el medio ambiente."
Tiene razon: nuestra generación no tenía esa moda verde en esos tiempos.
En aquel entonces, las botellas de leche, las botellas de gaseosa y las de cerveza se devolvían a la tienda. La tienda las enviaba de nuevo a la fábrica para ser lavadas y esterilizadas antes de llenarlas de nuevo, de manera que se podían usar  las mismas botellas una y otra vez. Así, realmente las reciclaban.
Pero no teníamos esta moda verde en nuestros tiempos.
Subíamos las escaleras, porque no había escaleras mecánicas en cada comercio ni oficina. Íbamos andando a las tiendas en lugar de ir en coches de 300 caballos de potencia cada vez que necesitábamos recorrer 200 metros .
Pero tenía razón. No teníamos la moda verde en nuestros días.
Por entonces, lavábamos los pañales de los bebés porque no los había desechables.
Secábamos la ropa en tendederos, no en secadoras que funcionan con 220 voltios. La energía solar y la eólica secaban verdaderamente nuestra ropa. Los chicos usaban la ropa de sus hermanos mayores, no siempre modelitos nuevos. Pero esa señora está en lo cierto:no teníamos una moda verde en nuestros días.
Entonces teníamos una televisión, o radio, en casa -no un televisor en cada habitación. Y la TV tenía una pantallita del tamaño de un pañuelo (¿se acuerdan?), no una pantallota del tamaño de un estadio.
En la cocina, molíamos y batíamos a mano, porque no había máquinas eléctricas que lo hiciesen por nosotros.

Cuando empaquetábamos algo frágil para enviarlo por correo, usábamos periódicos arrugados para protegerlo, no cartones  preformados o bolitas de plástico.


En esos tiempos no arrancábamos un motor y quemábamos gasolina sólo para cortar el césped. Usábamos una podadora que funcionaba a músculo. Hacíamos ejercicio trabajando, así que no necesitábamos ir a un gimnasio para correr sobre cintas mecánicas que funcionan con electricidad.
Pero ella está en lo cierto: no había en esos tiempos una moda verde.

Bebíamos del grifo cuando teníamos sed, en lugar de usar vasitos o botellas de plástico cada vez que teníamos que tomar agua.

Recargábamos las estilográficas con tinta, en lugar de comprar una nueva y cambiábamos las cuchillas de afeitar en vez de tirar a la basura toda la afeitadora sólo porque la hoja perdió su filo.
Pero no teníamos una moda verde por entonces.
En aquellos tiempos, la gente tomaba el tranvía o el autobús y los chicos iban en sus bicicletas a la escuela o andando, en lugar de usar a su mamá como  taxista las 24 horas.
 Teníamos un enchufe en cada habitación, no un regleta de enchufes para alimentar una docena de artefactos. Y no necesitábamos un aparato electrónico para recibir señales desde satélites situados a miles de kilómetros de distancia en el espacio para encontrar la pizzería más próxima.
Así que ¿no les parece lamentable que la actual generación se queje continuamente de lo irresponsables que éramos los viejospor no tener esta moda verde en nuestros tiempos?

lunes, 14 de noviembre de 2011

Lluvia de Otoño...

Con dificultad recorro las calles de mi ciudad día a día en un rutinario peregrinaje tratando de hacer algo de ejercicio y día a día vengo observando los cambios que en el entono se producen. Mi Salamanca ya no es la Salamanca pueblerina de los años sesenta, hoy calles peatonales llenas de vida dan a la urbe la sensación de una gran ciudad cuidada pese a los desmanes de algún gamberro que spray en mano ha hecho alguna pintada, o al cafre que turno que ha roto alguno de los bancos del paseo. Luz en los atardeceres, de farolas artísticas que imitan a las de la Plaza Mayor, en calles como las de Zamora o de Toro, gentes que van y vienen escrutando escaparates o como yo paseando simplemente.
La verdad, es que este Otoño, me ha acompañado en el empeño de mis paseos diarios,  ha faltado la lluvia, que mojando el suelo se convierte para mí en una autentica pista de patinaje en la que tratando de evitar la caída hago mil figuras casi imposibles para evitar terminar con mis huesos en tierra. ¡Claro!, Así cuando llego a casa, me siento muy cansado, los días de lluvia, como el de hoy, en el que ya hizo aparición este liquido elemento, me hacen difícil el caminar, temiendo cada paso y presintiendo un resbalón a cada instante, ¿Nunca os habéis fijado en lo que resbalan las tapas de alcantarillas cuando están mojadas?, ¿Las bandas blancas de los pasos de cebra?, ¿las hojas caídas del árbol durante el Otoño?. Solamente las losas de granito dan una cierta seguridad al andar sobre mojado, los empedrados de cantos rodados son una trampa para los tacones de las mujeres y causa de mil resbalones.
Pero yo seguiré paseando, con agua o sin ella, estas tardes en las que el sol se ha escondido a horas tempranas, quizá para no verme sufrir bajo la lluvia de Otoño.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Ser halcón o presa...

Jugaban las sombras a esconderse de la luz, que a través de las ramas de los árboles se filtraba levemente, cayendo sobre la alfombra verde del prado.
A lo lejos unas vacas pardas rumiaban su alimento con parsimonia, sin prisa, como si tuvieran todo el tiempo del mundo. Sobre la loma un halcón revoloteaba y en su vuelo pausado dejaba también ver que no tenia ninguna prisa por caer sobre su presa, que rompiendo la placidez  general del valle era el único animal asustado y nervioso que corría por salvar su vida intuyendo el peligro que se le avecinaba.
Halcón y presa jugaron su juego mortal ante la distante mirada del resto de los habitantes del valle, ninguno ayudó a la presa, ninguno recriminó al halcón, solo fue el juego de la vida y la muerte, del mas débil y el mas fuerte, la ley de la supervivencia y así el halcón, hoy ganador mañana puede ser presa de otro depredador.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Reflexiones sobre el post de un amigo que se siente olvidado...


Ciertamente es triste ser olvidado (como ese viejo cacharro) y destino de todos nosotros. Solo unos pocos afortunados permanecen en nuestra memoria por sus grandes obras, o por el cariño que le profesamos. Ser olvidado es moneda común entre los que compartimos trabajo, algo más difícil es que la familia te olvide y aún más una esposa o un marido (al menos eso espero y deseo). Los hijos te recordarán y lo harán los nietos en menor medida si has tenido la fortuna de conocerlos en años en los que pudieron fijar tu imagen.

Ser recordado por compañeros y amigos, puede ser empeño vano, quizá te olviden antes aquellos por los que más luchaste, como bien dices, quizá para no recordar la deuda que en su día contrajeron sin que esta estuviera escrita en ningún lugar, sin que nunca se les pidiera saldarla y sin que nadie exigiera o recordara la misma, pues la deuda nació de una actitud desinteresada de quien dio a luz la misma en un generoso acto de convivencia que ya quedó en el olvido.

La memoria es débil para quien no quiere recordar, pues el recuerdo le produce dolor.

Yo también he sentido el olvido sin olvidar a los que me olvidaron, también he sentido, quizá el desprecio, pero sin despreciar a quienes me despreciaron. Sé que en unos años, nadie me va a recordar en el entorno laboral, cuando me llegue la hora de abandonarlo y no me duele este olvido, hago lo que tengo que hacer y no busco el recuerdo, mientras yo si recuerdo y no olvido a todos cuantos por mi vida han pasado, acumulando así un tesoro que solo yo guardo dentro de mi y que de vez en cuando, dejo ver en alguno de mis escritos como un guiño,quizá inútil, a quien en su día me olvidó, no para que me recuerde, si no para que vean que yo no les olvido

martes, 8 de noviembre de 2011

Una de aeropuertos...

Desde hace algunos años, cada vez que tengo que viajar en avión, al pasar por los arcos de seguridad suelo advertir al vigilante de turno que la maquina va a pitar por causa de mi aparato ortopédico, no suele haber problema alguno y tras invitarme a pasar y dar un concierto de alarmas me revisan con un escáner de mano y puedo continuar mi camino, sin mayores problemas.
Solamente en una ocasión en el aeropuerto de Salamanca, debí pillar despistados a un par de guardias civiles que pese a mi advertencia previa al que estaba en el arco de seguridad, corrieron hacia mi metralleta en mano mientras su compañero les decía... ¡Tranquilos, tranquilos, esta controlado!... ¡Ni que fuera yo Bin Laden!, que diría la otra…(La verdad, es que aquello me acojonó bastante y aún me queda un cierto recelo a pasar por dichos arcos).
Pero la cosa no va por ahí, os habéis fijado alguna vez en los cartelitos de aviso que indican lo que esta prohibido subir a un avión…¡Yo si! Y veréis… puedo entender lo de las armas de fuego, las navajas, las tijeras, los líquidos inflamables y si me apuráis lo de las pinzas de depilar, aunque imagináis a un secuestrador con ellas en la mano diciendo: ¡desvíen el avión a Cuba!, supongo que tendría que añadir o le depilo las cejas al piloto…Pero lo que ya no entiendo es los de la "ballesta", ¿A quien se le ocurre viajar con una ballesta en la mano?, ¡Mire, es que soy Guillermo Tell! Y tengo una manía por cortar las manzanas a ballestazos…¡Hombre no!, pero luego, si uno sigue leyendo, es peor… Está prohibido introducir “catapultas”…¡Leche!, yo creía que ya no se usaban desde los romanos, por lo menos y además tiene que costar un riñón meter una catapulta como equipaje de mano...
Te hacen beber el agua que llevas en la mano, descalzarte, quitarte el cinturón, el reloj, te miran con desconfianza y luego te ponen el cartel pensando que eres capaz de pasar a escondidas una catapulta…¡Nos han fastidiado!, yo recuerdo que en el aeropuerto de Valencia hace años y mucho antes de lo de las torres gemelas, al regreso de una convención me deshicieron el equipaje de mano, pues en el mismo habían visto las hojillas de afeitar, de esas de tres hojas,¿Pero como se puede cometer una atentado con esto?...El cachondeo de mis compañeros de viaje ( mis apreciados gallegos) fue enorme, incluso alguno, en plan de cachondeo repetia una y otra vez provocando el mosqueo de los guardias... ¡Cuidado con este, que es un terrorista peligroso!, no ven la agilidad que tiene...En fin creo que todos podemos contar alguna aventurilla de estas en los aeropuertos y si la tenéis, hacer algún comentario con la misma en este post.

jueves, 3 de noviembre de 2011

Tizonazos...

Si hace unos días hablaba del mas allá, hoy le toca al “mas acá”, a ese devenir diario en el que cada segundo se convierte en pasado y el pasado en historia, la historia de nuestra existencia.
Cielo e infierno se mezclan cada segundo y mientras unos disfrutan cada segundo de esta vida otros padecen calamidades sin fin, algunos, (la gran mayoría), alternamos ambas situaciones y de esta manera logramos hacer mas llevadera la subsistencia.
Cada cual tiene su infierno particular, unas veces, la salud, otras la economía, situaciones familiares, laborales, sucesos puntuales, nos hacen sentir cerca de ese averno que se nos ha prometido si no somos, como alguien supuso un día debería de ser  la perfección absoluta y el comportamiento inmaculado.
Muchas veces he llegado a pensar que el infierno no es cosa del más allá, viendo las imágenes de los telediarios, uno termina por pensar que el abismo esta en esta vida, en ese mas acá en el que nos desenvolvemos cada instante, hambre, guerras, catástrofes, violencia permanente en cada esquina.
Alguien en broma me decía: “Como terminemos en el infierno te voy a dar mil tizonazos”, y los tizonazos, ya me los dan a diario en esta vida, con mis eternos dolores, con los roces que la convivencia produce con compañeros, amigos e incluso con familiares, con las preocupaciones por el futuro, ese futuro que tan negro nos ponen los economistas cada día y que terminan por rematar los políticos con cada una de sus manifestaciones, estos si que nos dan tizonazos y encima le hemos votado para ello.
No se si existe el mas allá, pero es de suponer, que teniendo todo sus dos polos, negativo y positivo, bien y mal, blanco y negro, exista algo distinto a lo que vivimos cada día en este mas acá, aunque solo sea por mantener el equilibrio entre los extremos.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Contundecia...

Cuentan que en plena guerra de la independencia, el presiente George Washington envió a sus oficiales a requisar los caballos de los terratenientes locales con el fin de usarlos en sus campañas, Un grupo de oficiales llegó a una vieja mansión donde fueron recibidos por su anciana dueña a la que dijeron:
“Señora venimos a pedirle sus caballos en nombre del gobierno”
A lo que la anciana respondió:
“¿Con que autoridad?”
“Con la del general George Washington, comandante del ejercito americano” respondieron los oficiales…
Dicen que la anciana sonriendo zanjó el tema diciendo:
“Váyanse y díganle al general Washington que su madre dice que no puede darle los caballos”
Moraleja: una madre es una madre….

lunes, 31 de octubre de 2011

¡Buenos dias tristeza!..

¡Buenos días tristeza!, hoy me acompañas durante todo el día y yo se bien por que, serás mi compañera dolorosa durante toda la jornada, tortura que me roe el alma y nubla la mente con el recuerdo de algo que no debió de ocurrir. Muchas veces he pedido al cielo que escuche mis plegarias y como en el Tenorio (Propio de estos días), ¡clamé al cielo y el cielo no me oyó!, pero no asumiré el verso siguiente, aquel que decía:... ¡y puesto que sus puertas me cierra, de mis pasos en la tierra responda el cielo y no yo!...Seguiré llevando mi pena y abrigando la esperanza de un futuro en el que la tristeza se torne alegría y mis ruegos sean por fin oídos. Mientras, arrastrare mis ya doloridos y cansados huesos por esta vida, dándote tristeza los buenos días.

sábado, 29 de octubre de 2011

Cuando uno cae...

Son tantas las veces que uno da con los huesos en tierra por caídas tontas que en ocasiones me entran ganas de hacer lo de aquel chiste que me contaron… Un hombre acaba de caer desde un tercer piso y la gente arremolinándose le pregunta ¿que ha pasado?... a lo que responde…¡No se yo acabo de llegar!...
Hay caídas tontas, que uno no llega nunca a explicarse por que ocurren ya que vas con todo el cuidado del mundo, otras son despistes por un suelo mojado o un obstáculo en la calzada, en el que entras con todo el garbo del mundo y acabas haciendo piruetas de trapecista y caídas que presientes y que son casi inevitables (las menos).
Mi experiencia es tal, que acostumbrado a las caídas (por suerte soy como los gatos) no me suelo hacer mas que algún rasguño en el peor de los casos, y no suelo darles importancia, pero los que me rodean se llevan unos sustos de “aupa”…
Siempre recuerdo, que trabajando hace años entré en la oficina recién fregada con todas mis energías y como era de prever acabé en el suelo, mis dos compañeras de trabajo, asustadas, por ser la primera caída que vieron acudieron prestas a socorrerme intentando levantarme y resbalando acabaron las dos en el suelo haciéndome compañía…mi reacción fue instintiva…¡Levantaros no me ayudéis!... ¿si entra alguien que van a pensar al vernos a los tres en el suelo?...luego…la costumbre de verme caer hizo que una ocasión, con la oficina llena de gente, llegué a caer estrepitosamente contra el mostrador causando un ruido estremecedor, la gente asustada preguntaba lo de siempre…¿ que ha pasado?... A lo que una de mis compañeras, quitando importancia al asunto, respondió sin levantar la vista de los papeles…¡Nada…el jefe, que se ha matado otra vez!...¿Maripaz, no podías haber preguntado si me hice daño?...Espero por raro que pueda parecer ,”seguir cayéndome muchos años”, será señal de que aún camino...

martes, 25 de octubre de 2011

¡El más allá!...allá tu...

En una conversación con un amigo surgió el tema de “el mas allá” ,que quiere decir mas lejos de la esquina, muuuucho mas lejos de Barcelona y de Roma, es decir cuando te vas para el otro barrio , al corral de los quietos o al huerto del cura, como decía mi amigo.
Todas las religiones aseguran que después de esta vida hay algo y cada uno lo interpreta a su manera: Los Budistas, hablan de la reencarnación. ¡Mira tu!, no es mala idea dependiendo de como se mire, puedes reencarnarte en León (Mejor no, todo el día tirado en la sabana sin hacer nada ¡Que aburrido!), en Gorila (Tampoco, no es cuestión de estar haciendo el mono todo el día). ¡Que se yo!, no termina de convencerme esto de la reencarnación.
Si por otro lado  tomamos la religión mahometana, la cosa en principio no pinta mal. Un cielo de palacios lujosos como los de los jeques árabes, comida y bebida en abundancia… pero hay algo que no me termina de encajar y es lo de las 76 huríes, para cada uno, en principio dices ¡Joe!, pero luego piensas… si también viene mi mujer… menuda se puede armar, y descartas también este otro mas allá árabe, por si las moscas y para evitar conflictos.
Nos queda la religión católica, pero ya para empezar la cosa tiene alguna pega; ¿No dicen que en el cielo están los “justos”?, pues eso quiere decir que no entra ninguno más y ahora entiendo lo del portero (San Pedro) con unas enormes llaves, es para que no se pueda colar ninguno ya que el aforo debe estar completo como dicen, algo parecido a como cuando se llena una discoteca, además, seguro que allí no se puede jugar al póquer, ni montar una fiesta con marisco y buenos vinos, ¡Son unos aburridos!, solo saben volar de nube en nube y yo no tengo muy claro que esas alitas de plumas blancas, puedan mantenerme en el aire con seguridad, prefiero un parapente.
Nos queda la alternativa del infierno, pero tener que aguantar toda una eternidad a Hitler, Gadafi, Musolini, Franco y gentes como estas, tiene que ser un”peñazo”  escuchando sus batallitas y además que seguro también están algunos de mis profes del bachillerato y de la carrera, ¡Que no!, que esto tampoco me convence.
Total, que eso del mas allá, por mi puede esperar hasta que haya otra alternativa mas atractiva y me temo que de momento no hay nadie, con la que esta cayendo, que quiera abrir un negocio nuevo de estos.

lunes, 24 de octubre de 2011

Amigo...

Compañero inseparable con el que de la mano voy a todas partes, sintiendo su apoyo permanente, se ha hecho imprescindible, un amigo siempre dispuesto a prestar su ayuda en momentos difíciles que superar o cuando la inestabilidad hace su presencia. Siempre está ahí, mudo, rígido, firme en su cometido, pasando casi desapercibido. Rara es la vez que me separo de él pues ya voy necesitando siempre su compañía. Silencioso es testigo de mis esfuerzos por seguir el ritmo de los que me acompañan y nunca pide nada a cambio, es tal su fidelidad que si yo caigo, el cae acompañándome en la caída. Juguete de niños y mayores que sienten la curiosidad de conocer que se siente ir de su mano, pero siempre vuelve a mí sabiendo que soy yo quien más le necesita.
Habréis imaginado que hablo de mi "bastón", ese que en alguna ocasión traté de cambiarlo por otro mas aparente, con empuñadura de plata y que al final me salió rana, la plata manchaba la mano y mi bastón de siempre es limpio, firme, el otro, solo servia para dar imagen, mientras que este pasa sin hacerse apenas notar, cumpliendo su cometido con la seguridad que se le requiere.
Podría parecer que estoy haciendo una alegoría de la amistad y en el fondo así puede ser, mi amigo el bastón tiene mucho en común con los verdaderos amigos, ya no pienso en cambiarlo, quizá siga conmigo hasta que sus fuerzas o las mías ya no nos hagan necesarios el uno al otro. Hoy sigue aquí, a mi lado, esperando a que yo continúe mi camino para seguir conmigo la senda.

domingo, 23 de octubre de 2011

Quijote sin escudero...

Lanza en ristre y sin triste figura, caballero andante,( poco y con esfuerzo, pero andante) Quijote empedernido e impenitente hasta la muerte, defendiendo causas pedidas, ayudando a quien fuera menester y en cualquier circunstancia, sin importar clase, sexo, raza, condición y religión haciendo gala del respeto al prójimo, que aprendí de mis padres, no escarmentando que quien da pan a perro ajeno pierde pan y pierde perro, perdonando ofensas y olvidando agravios, luchando día a día por un utópico mundo mejor, amigo de mis amigos y protector de mi familia, nunca aprenderé a usar armas como la revancha, la envidia, el odio, la burla, el desprecio con las que fui herido y sané gracias a la medicina mas poderosa de este mundo, “la amistad y el cariño de la familia”.
Seguiré, batiéndome con los molinos y creyendo que la ofensa no fue intencionada, que el dolor propio es menor que el ajeno y todo el mundo merece una segunda oportunidad, cabalgaré en los páramos amigos y disfrutaré con la hospitalidad que me brindan y mi mayor anhelo, que al llegar al final de mi andadura, haya alguien que me recuerde aunque sea como un Quijote que un día se cruzó en su camino.

viernes, 21 de octubre de 2011

Cordura y locura

Hace unas horas y por casualidad haciendo zapping, caí en la cadena de Interecomomia,  en el momento en que un grupo de contertulios comentaban el cese de actividades de ETA y a la vez la muerte de Gadafi... era tal de barullo de información, con interrupciones continuas entre los contertulios y las voces desmedidas de los comentarios, que uno casi termina por pensar, mas bien entenderles, que gracias a la muerte de Gadafi, ETA ha dejado las  armas y que el tirano era el causante de la existencia de la organización que hoy nos ha dado una alegría (de momento en pañales) a los españolitos de a pie que deberia terminar al menos, dejando las armas de una vez por todas,(pidamos que así sea), a si mismo algún comentario que pretendía ser jocoso apuntaba a la mala suerte de los pilotos españoles que acababan de regresar a España y no habían sido los que ametrallaron al dirigente Libio poniendo en sospecha el hecho de que quince camiones de resistentes estaban esperando al tirano y se les adelantó una caza extranjero abatiéndolo con una ráfaga de ametralladora, alguien se preguntaba, ¿es que temían que los resistentes lo cogieran vivo y contara mas de lo que se debía?. Bromas a parte, HA SIDO UN GRAN DIA en el que de nuevo la libertad se abre paso, en el que uno recupera parte de la confianza perdida en la humanidad, pese a que aún sigue pendientes Haití, Somalia y tantos lugares donde la muerte campa a sus anchas y nadie parece poner remedio, mientras se dilapidan cantidades ingentes de dinero y medios en los países desarrollados. Pocos dictadores quedan en el planeta y mientras exista uno solo y una sola organización dedicada a provocar el terror y causar el dolor con victimas inocentes (siempre lo son), no habré recuperado mi confianza en el ser humano. Decía Einstein: "hay dos cosas infinitas, el universo y la estupidez humana", añadiendo a renglón seguido: "y no estoy tan seguro de la primera". Espero que la cordura se imponga en nuestro mundo, pero mucho me temo que no llegaré a ver como se deponen todas las armas y se distribuye la riqueza de forma racional ayudando a los más necesitados. Seguíra, por desgracia imperando la locura.

jueves, 20 de octubre de 2011

Nuevo "Celtiberia Show"...

Últimamente vengo colgando en mi Facebook, emulando al Sr. Carandell con su “Celtiberia Show “, una serie de fotografías de carteles curiosos que me van llegando al correo, aportados por amigos y conocidos, sobre cosas curiosas y errores de redacción que no dejan de tener su gracia, pero demuestran, (como ya lo hizo el mencionado escritor y humorista), en muchas ocasiones una falta de cultura total en un país que sigue siendo “diferente” y en el que todo vale. Que a pesar de los años que distan desde la publicación del libro del autor mencionado las cosas no han cambiado tanto. No son ya las faltas de ortografía, si no la redacción de los carteles o la incongruencia de los mismos lo que produce una hilaridad triste al ser una demostración palpable de la pobreza de formación de un pueblo que siempre se ha vanagloriado de tener grandes escritores y universidades de reconocido prestigio internacional. Lo que falla es la formación básica, la de la escuela de toda la vida en la que los nuevos planes de estudio y la planificación de la enseñanza siguen fallando, por mucho que a nuestros políticos se les llene la boca de frases grandilocuentes cada vez que inauguran un aula informatizada o un colegio de última generación. La tecnología no va a ayudar en mucho a la formación que de verdad imparten los sufridos enseñantes, cada vez mas limitados en su labor y mucho menos en la enseñanza de lo fundamental que ha parecido irse por los cerros de no se donde, olvidando la ortografía, los buenos modales junto con una elemental educación y respeto a los demás. Básicamente la población sabe leer, otra cosa es que sepa escribir y mucho menos componer una redacción clara y concisa. No es cuestión de pedir, que todo el mundo sea capaz de escribir una novela y mucho menos un estudio profundo y sesudo, pero si que se sepan expresar correctamente y sin faltas, que los comentarios que se cuelgan en Internet, tengan una lectura fácil sin dobles sentidos ( salvo que así se quiera hacer intencionadamente). Ejemplo: No es lo mismo decir: “un abrigo de señora, que una señora de abrigo”, colgar un cartel de “Avierto, en lugar de Abierto” o indicar como dirección a seguir en el cartel que encabeza este post: “Subida por la bajada”. Lamentablemente no son meras anécdotas, si uno lee por ejemplo, con detenimiento los comentarios a una noticia publicada en Internet, termina por pensar que independientemente de que los comentarios en la gran mayoría son una estupidez, cargada de una falta de respeto, generalmente plagados de insultos y tacos, uno termina por pensar, que la gente no a ido nunca a la escuela o que lo mas cerca que ha estado de la misma ha sido a la puerta y de pasada, lugar donde aprendieron a perder el respeto a todo y a todos. ¿Donde han quedado los esfuerzos de los maestros?, ¿Tendrá alguna vez solución esto o lo damos por perdido? En fin ya sabéis que para llegar hasta lo alto de aquella ermita, hay que hacerlo por la bajada.

martes, 18 de octubre de 2011

Otoño en París, Otoño en Salamanca

Es Otoño en Paris, dicen que una imagen vale mas que mil palabras y hoy os dejo este hermoso cuadro que refleja un Paris nostálgico, como el que siento dentro de mi en estos momentos. Si hay una ciudad que me enamoró, fue esta, recorrí sus calles sin sentirme cansado, admirando sus bulevares y dejándome soñar a orillas del Sena mientras los Bateaus surcaban sus aguas bajo la catedral de Notre Dame, siempre en compañía de mi mujer y mis hijos, será un recuerdo imborrable de aquella semana en la que no me detuvieron ni las escaleras del metro ni aquel largo paseo por los Campos Eliseos desde el Arco de Triunfo hasta la Plaza de la Concordia.
Hoy recorriendo las calles de mi Salamanca querida, he visto nuevos bulevares llenos de terrazas, que por un momento me han recordado aquellos otros en los que en algún momento paré para coger fuerzas y seguir la caminata hacia los inválidos o la Torre Eiffel. Aunque no hay comparación posible, siempre hay un chispazo que te recuerda aquellas terrazas, los arcos de la calle Vendome, similares a los de la Gran Vía de Salamanca .Aquel paseo por Rue Royale, camino de la Madeleine y la parada en Maxim´s para dejar constancia con una foto a sus puertas, o aquel momento de descanso bajo la Torre Eiffel, sentado bajo su estructura en un banco mientras apuraba una Coca Cola. Otoño calido en el que el sol se ha negado a dejar sitio a las nubes y la lluvia dándome la oportunidad de seguir con mis pequeños paseos diarios sin temor al resbalón en calles mojadas, recordando siempre la ciudad de la Luz en la que este cansancio que ahora siento al caminar aún no estaba presente.

sábado, 15 de octubre de 2011

LEALTAD...

No se por que razón, uno que debe de vivir en un mundo de marcianos, no acaba de comprender las actitudes de determinadas personas que se empeñan en hacer lo contrario de lo que piensan e incluso de lo que realmente desean. La LEALTAD (así en mayúsculas), parece ser un objeto de lujo raramente utilizado, escasamente valorado e incluso si se me apura denostado en la gran mayoría de las ocasiones.
Si Lealtad, es decir la verdad al amigo, aunque duela, Si Lealtad, es seguir manteniendo el mismo trato con el caído, que cuando lucía en todo su esplendor, Si Lealtad, es guardar silencio en perjuicio propio para beneficiar al amigo, Si Lealtad, es no apuntar con el dedo cuando se comete un error y se busca una explicación razonable, Si Lealtad, es decir que se ha cometido un error y se ayuda a subsanarlo, sin meter el dedo en la llaga. Si Lealtad, es que aun sabiendo que te apuñalan no devuelves la puñalada. Si lealtad es esperar a la puerta sabiendo que nunca regresará. Si lealtad es ayudar sin esperar nada a cambio.
Yo puedo decir que fui leal, Hay quien confunde muchas veces lealtad con otras cosas, lealtad no es el "pelotilleo", hacer la rosca, alabar sin ton ni son, la lealtad es callada, silenciosa, humilde, sufrida.
Lealtad siento en quien sin palabras altisonantes, te muestra un camino, te remite un mensaje de animo, te confiesa una confidencia sin tener por que hacerla, te escucha un lamento en silencio y con la mirada te envía su apoyo para seguir la senda, Lealtad es cerrar una cortina para que nadie vea tu tristeza ocultándola a miradas indiscretas, Lealtad es una palmada en la espalda cuando el animo esta decaído
Si he sentido lealtad aunque esta sea rara, soy afortunado por tener amigos y compañeros leales, en este mundo de marcianos donde la lealtad es un artículo de lujo.

viernes, 14 de octubre de 2011

Aquellos juguetes...

Encendí mi ordenador con la intención de escribir algo en este blog, una raya vertical parpadeaba en la pantalla a la espera de las primeras letras mientras mi mente se había quedado en blanco, esta vez no sabia que contar, me levanté, dejando la pantalla en espera mientras en mi cabeza bullían un montón de ideas, pero ninguna me parecía interesante, fue entonces cuando mi vista se posó sobre una vieja foto en una estantería, en ella estoy yo hace casi 29 años con una pequeña en mis brazos (mi hija) y a lado otra foto en la que un pequeño de mirada traviesa, con una cazadora verde, parece estar esperando un descuido para hacer alguna de las suyas. Mis hijos, ¡Como han crecido! Una nostalgia de su niñez me invadio por unos instantes, ¡Que pequeños eran! Y cuantos recuerdos de un tiempo lejano en los que repartía por el suelo del salón, formando un gran círculo, un montón de pequeñas figuras de goma (Mikey, Pluto, el pato Donald, la calabaza Ruperta, el gato Félix), luego, sentado con mi hija en el centro de aquel circulo de figuras jugábamos al ”corro de la patata”, después, con meticulosidad increíble, ella recogía una a una las figuras guardándolas con esmero en una caja de latón. Con Fernando, eran los mini coches con los que hacíamos carreras por el suelo y garajes con cajas de cartón,  terminado estrellados contra las patas de la mesa camilla o el marco del balcón y esta vez, eramos su madre o yo quien los terminaba recogiendo. Juegos de niños que hoy llegaron a mi mente junto con aquellas caritas llenas de ilusión de unos pequeños que han crecido y se mantienen en mi recuerdo con nostalgia, junto con el orgullo de verlos crecer y poder seguir compartiendo con ellos momentos inolvidables en viajes y vacaciones.