jueves, 26 de enero de 2012

Impresiones de un aprendiz de luchador...

Cuando a cada paso que das, aparece un nuevo dolor, cuando a cada movimiento que haces, te asalta una nueva molestia, terminas por pensar ¡Es que estoy vivo! y continúas la marcha sin sentirte luchador pues asumes como normal algo que has vivido toda la vida. Luchadores son aquellos que no habiendo padecido nunca ningún mal, son capaces de superar los encontronazos de la vida y por desgracia últimamente veo a mi alrededor gentes que conozco de toda la vida, trabajadores incansables, profesionales volcados en su trabajo a los que ese maldito mal con nombre de horóscopo ha sumido en una tristeza que no son capaces de superar a pesar los esfuerzos que se les ve hacen por seguir adelante en su camino. Se que no hay comparación posible, tienen quizá los días contados y lo saben, a pesar de  lo que muchos creen, que la vida les pone una venda en los ojos, no es verdad. ¿Como se puede ocultar a un medico que tiene cáncer?, ¿Como es posible que un abogado no sepa que mal tiene, cuando lo lee en los diagnósticos que  le han dado?...No, no tienen la venda en los ojos. Sin ellos saberlo y a pesar de su mirada triste, son luchadores, auténticos gladiadores empeñados en ganarle la batalla a un enemigo terrible que no tiene compasión. Se aferran a la vida y con su ejemplo son la demostración palpable de que la vida es bella a pesar de todo y por encima de todo y luchan por conservarla, por disfrutarla aún entre dolores y tratamientos agresivos y dolorosos. Estos si que son luchadores, los demás solo somos aprendices de guerreros.
Hoy va dedicado este post a todos aquellos que no se rinden, incluyendo a los familiares que les rodean y también sufren. ¿Quien dijo que vivir era fácil?, aun sin enfermedad se sufre, si se ve sufrir al ser querido.