Chapuceros S.A....

Intencionadamente me había colocado frente a mi interlocutor en aquella mesa, en una situación en la que podría observar cada uno de su movimientos mientras hablábamos, sus gestos me irían diciendo su estado de animo, si mentía o decía la verdad en cada una de sus afirmaciones o si en algún momento se sentía incomodo ante mis preguntas. Solo me guiaba la curiosidad de saber lo que opinaba aquel personaje, que hasta hace muy poco ocupaba un cargo importante en la administración y que fue defenestrado tras los comicios locales.
Desde luego, no tenia fama de intachable, mucho menos de respetuoso y educado, (aunque a mi me respetaba, pues habiamos compartido muchas horas de colegio cuando eramos jovenes) , no era una persona de meritos propios, sus éxitos y logros los había adquirido trepando y haciéndose con las ideas de otros y esfuerzos de la gente que le rodeo durante su mandato, escogida a propósito por el mismo para que nadie le hiciera sombra.
Hoy, arrinconado, todo su empeño era demostrar que había sido traicionado por sus correligionarios, que aquellos a quienes el encumbro terminaron por socavar sus pies de barro haciendo caer aquella figura que el mismo se había forjado y no era mas que un esperpento de si mismo.
Una y otra vez sus lamentos se dirigían a la perdida de su status y la minoración de sus ingresos, pero nunca, ni por un solo instante hizo mención a sus tremendo errores, a su prepotencia y desprecio por quienes en su día le colocaron en el puesto que había desempeñado, traicionado la confianza de aquellos y demostrando una vez mas su inutilidad para gestionar y dirigir por buen camino aquello que las urnas habían encomendado.
Mi pensamiento fue entonces… ¿cuantos como este sujeto nos están dirigiendo?, Y recordé algo sucedido no hace muchos días. El 18 de Abril se publico un Real decreto sobre Sanidad que consta de 6 paginas, (decreto 16/2012), cuatro días después aparece en el BOE un relación de rectificaciones sobre el mismo de 4 paginas, en la que no solo se corregía errores ortográficos, (situación de comas y puntos, correcciones de B y V, aclaración de puntos no desarrollados correctamente etc.) giros lingüísticos, fechas de entrada en vigor equivocadas  y ordenes varias que se contradecían entre el párrafo anterior y el que le seguía…Pensé ¿Quien demonios redacta estos Decretos?, ¿ No hay quien los corrija antes de su publicación para que luego haya que hacer una relación de correcciones que supera las 70 en 4 folios?, ¿Donde estudiaron estos redactores que cometen tantas faltas de ortografía y no son capaces de redactar un escrito de forma correcta? ¡Y estos son los que nos van a arreglar el país, como al parecer era el cometido de mi interlocutor con el que comencé este escrito!... ¡Estamos arreglados!...sigo pensando que en este mundo se suelen cambiar las cosas, para terminar no cambiando nada…